«Y fue Jarcia el medio idóneo para conocer y amar a Cristo…»; y esta experiencia de conocer a Cristo, me ha llevado a ¡Consagrarme a Él, con toda mi vida!.
Cada año la comunidad nos invita a experimentar un encuentro nuevo con Jesús a vivir experiencias únicas e inolvidables, y es así como este año volví a vivir un nuevo encuentro, una nueva aventura, un nuevo desafío, un nuevo campamento.
El frío, la lluvia, el sol, el fuego, las estrellas, todo era un hermoso espectáculo que el mismo Jesús me regalaba, recuerdo haberle dicho a una patrulla: “Chicos, pidamos a San Isidro Labrador, (así se llamaba la comunidad donde nos encontrábamos) que se lleve el agua y traiga el sol” y Jesús no tardó en escuchar la petición de sus pequeños.

Cada día estuvo lleno de regalos, ver a los jarcianos hacer los acertijos, compartir las reflexiones de cada juego, de cada charla, como tenían que ganarse los productos para poder comer, unos lo hacían más rápido que otros, otros se demoraron la vida. Poder realizar las actividades, entre risas, caídas, conocer a nuevos amigos, a nuevos hermanos en Cristo pudieron terminar con lo que se les había pedido, ese era justamente el reto al que nos había convocado Jesús:
“Ámense los unos a los otros como yo los he amado”, y vivir ese encuentro personal con el Amado.
¡Qué hermoso encuentro Jesús!, yo también lo viví en este campamento y otra vez te digo: «Sí mi Señor, hágase tu voluntad en mi comunidad».

Mayra Astudillo.
Miembro Base consagrada en la Comunidad Misionera Jarcia @CMJarcia
Fotos de la página de facebook de la Comunidad de Vida de Jarcia @cdvjarcia
